domingo, 2 de octubre de 2011

El Suicidio de Una Gota de Lluvia

¡Que soy un Ángel!... ¿Por qué soy un Ángel?... ¿Por qué, si lo soy, no siento alas a mi alcance? ¿Por qué es que veo el cielo tan lejano, y no lo alcanzo con solo estirar mi mano? ¿Por qué miento, engaño, sufro y suspiro cada vez que mi vida pende de un hilo? ¿Por qué sigo imaginando un demonio cada mañana en el reflejo de mi ventana? ¿Por qué la humanidad no me importa y me sigue pareciendo una simple excusa del cómo alguien se comporta? ¿Por qué sigo pensando que vivo en un infierno plagado de alimañas sin cabeza y de animales sin conciencia? ¿Por qué me continúo imaginando que la muerte no es una condena eterna sino simple cuestión de suerte? ¿Por qué se que moriré y que nada puedo hacer? ¿Soy un Ángel? ¿Aún crees que lo soy?... Bueno, pues no me importa. Solo seguiré viviendo, me seguiré llamando así y seguirá viviendo aquí. Hasta que la vida de alguien pueda salvar; hasta que, en una vida, alguien me pueda salvar. De este momento, de este enorme tormento, que a todos nos arde, que a todos nos duele, que a todos no mantiene en este mundo de amantes. Tan solo caeré, caeré y caeré y cuando toque el suelo sabré que me suicidé.

No hay comentarios:

Publicar un comentario